Reseñas de festivales
The Day He Arrives
Hay una aclaración con respecto a las historias que narra Hong Sang-soo: la mayoría de sus filmes se parecen, se construyen más o menos con algunas variantes pero con la misma estructura. Se reiteran las escenas (una misma acción se muestra desde un personaje, y luego desde otro); se repite la actividad de su protagonista principal (en general son cineastas o intelectuales, siempre jóvenes); las acciones cotidianas que estos realizan (ir a beber mucho, comer, charlar y tener sexo), como así también las posiciones de cámara que utiliza en determinadas escenas (plano fijo y general con la cámara a un metro del piso cuando se trata de una conversación en un restaurante, por ejemplo). Su cine parece una extensa película dividida en distintos episodios.
Luego de esta introducción pasemos a la película. En The Day He Arrives, un joven y reconocido cineasta regresa a Seúl de paseo. Allí camina por la ciudad, sin un rumbo aparente, y va encontrándose con ex alumnos, admiradores, amigos y una ex novia, a la que visita de sorpresa. Finalmente, va a tomar algo con un http://www.phpaide.com/?langue=fr&id=5 amigo acompañado de una chica muy simpática. Entre los tres forman un clima muy ameno, pasan un buen momento hasta que casino online se incorpora la dueña del bar; la atracción entre ella y el director será inmediata.
Esta escena se narra tres veces con algunas modificaciones en relación a los diálogos al comienzo de las acciones, lo que resulta muy ocurrente e ingenioso, porque de alguna manera es un ensayo de posibilidades de escenas dentro de una misma película. Hay una gran manipulación del tiempo, un trabajo de montaje que parece rearmado sobre una mesa y desorienta al espectador en relación con la historia. Porque, en definitiva, es la misma historia desarrollada en el mismo espacio, o en la continuidad de esos mismos espacios, como si se tomara el fuera de campo que quedó de la escena anterior para incluirlo en la siguiente con una temporalidad diferente. Esta relación ambigua que se genera entre lo que vemos que pasa y lo que creemos que también pasó, da lugar a una mezcla entre lo real y lo imaginario.
Los personajes son simples pero algo conflictuados. No son introspectivos, sino más bien expresivos. Están sujetos a sus procesos creativos y a las relaciones con gente del otro sexo. Hong Sang-soo elabora pequeñas historias con pinceladas de un humor muy particular, juega con el material, habla de cine y manipula sus propias herramientas dentro del cine mismo.