Mío o de nadie

Una productora con una extensa carrera, que ha trabajado en muchos de los grandes filmes de Tim Burton, aventurándose como directora, no parece ser algo extraño en la industria cinematográfica. Sin establecer comparaciones con la gran obra de Burton, la directora Denise Di Novi parte de un presupuesto reducido para producir Mio o de nadie, similar al que dispusiera el director norteamericano para producir Big Eyes (2014), aunque ello no la priva de contar en su reparto con la participación de Rosario Dawson y Katherine Heigl. Mio o de nadie tiene elementos para convertirse en un buen thriller, pero termina viéndose penalizado por otros aspectos que restan mucho al momento de evaluar la obra por completo.

Denise Di Novi dirige su primer largometraje, que busca abrirse paso en el género de los thrillers. Debo decir que habiendo visto recientemente Perdida (Gone Girl, David Fincher, 2014) y La chica del tren (The Girl on the Train, Tate Taylor, 2016), Mio o de nadie no hizo más que engrosar la lista de filmes similares, que buscan develar sobre el final las reales intenciones de los personajes.

Con un guion interesante, producido por David Leslie Johnson, guionista de Expediente Warren: The Conjuring (The Conjuring, James Wan, 2013), Expediente Warren: El caso Enfield (The Conjuring 2, James Wan, 2016) y La chica de la capa roja (Red Riding Hood, Catherine Hardwick, 2011) en colaboración con Christina Hodson, Mio o de nadie explora el drama que vive una mujer que rehízo su vida luego de escapar de un pasado tormentoso, con un ex novio que ejercía violencia sobre su persona. Julia Banks (Rosario Dawson) vive el mejor momento de su vida luego de que la justicia dispusiera un límite perimetral sobre ella. Por celos o por envidia, la ex novia de su nuevo novio, Tessa Connover (Katherine Heigl) se embarca en la tarea de hacerle la vida imposible, demostrando estar dispuesta a todo.

Por otro lado, debemos citar uno de los puntos más flojos de la cinta, la música.  A cargo de Toby Chu, el sonido por momentos nos saca de contexto, con un estilo muy propio de una telenovela, muchas veces confundiéndonos sobre acciones de los personajes, o quitándoles la tensión que requiere un thriller. Chu ha trabajado en el departamento de sonido de filmes como Shrek (Andrew Adamson, Vicky Jenson, 2001), El fuego de la venganza (Man on Fire, Tony Scott, 2004) y Las crónicas de Narnia: El león, la bruja y el armario (The Chronicles of Narnia: The Lion, the Witch and the Wardrobe, Andrew Adamson, 2005). A pesar de haber contribuido en las películas mencionadas, el aporte de Chu como compositor deja bastante que desear.

Y si de otro aspecto negativo debemos hablar, que mal ejecutado, resta mucho al momento de construir tensión en un thriller, ese es el montaje, a cargo de Frédéric Thoraval, montajista francés que ha trabajado en Venganza (Taken, Pierre Morel, 2008). Muchas veces las escenas terminan en un fundido a negro que no lleva a ningún lado, desconectan completamente el hilo temporal del filme, y en conjunto, con lo mencionado anteriormente respecto al sonido, refuerzan esa sensación de estar viendo una telenovela.

Di Novi demuestra un trabajo aceptable, especialmente porque a pesar de los puntos en contra que he mencionado, Mio o de nadie capta nuestra atención y construye una tensión que va y vuelve, pero nunca nos llega a mantener totalmente en vilo. Parte de esa valoración se apoya en un gran trabajo de la mano de Rosario Dawson y Katherine Heigl (y al resto del reparto, mejor no valorarlo). Restará saber entonces si su carrera seguirá esta misma línea o, partiendo de los puntos en contra citados, intentará perfeccionarlos.