Críticas
Determinación amorosa que hace milagros
Secuestrado
Otros títulos: Desaparecido.
Kidnap. Luis Prieto. EUA, 2017.
Esta es una película de suspenso. No fue muy bien acogida por la crítica, pero me ha gustado bastante. Considero que la actuación de Halle Berry es de destacar. Como es de esperar, tiene muchos de los elementos típicos de los filmes de este tipo: sorpresiva e inesperada acción de secuestro, en este caso la víctima es un niño; respuesta mediocre y poco efectiva de la policía y de los sistemas de seguridad; secuestradores violentos y enteramente carentes de compasión y de humanismo; circunstancias imposibles de vencer y aparente dominio de los soberbios malhechores que actúan a mansalva y sobre seguro; pedidos de rescate desorbitados.
Ha sido esta la situación casi universal en todos las regiones y países azotados desde siempre por este terrible flagelo. La sociedad lo ha enfrentado con éxito variado, en general sin mucha fortuna, desde esas épocas de Julio César, que gestionó el pago de su rescate por parte de piratas del mediterráneo, no sin prometer a sus captores que volvería por ellos y los castigaría, como en realidad sucedió. Cuenta Plutarco que una vez secuestrado por piratas sicilianos, en lugar de sentirse intimidado, exigió que se incrementara el rescate de veinte talentos de plata a cincuenta, ya que sentía que era poco el pedido para alguien tan importante. Los piratas permitieron que Julio César enviara a su sirviente a recoger el dinero del rescate y, en verdad, lo trataron de buenas maneras. Desafortunadamente para ellos, Julio César, luego de ser liberado envió una flota para capturarlos y castigarlos, y así sucedió. De cierta manera, trazó una ruta este antiguo y famoso personaje: Los afectados deben actuar con sagacidad e inteligencia y ganarse a sus captores, y probablemente, tendrán que pagar, aunque, de alguna manera, los criminales eventualmente serán castigados.
El asunto se agrava cuando las víctimas del secuestro son niños y cuando los perpetradores hacen parte de redes de trata de personas y de explotación de niños y de mujeres jóvenes. En este caso, no tienen ningún interés real de recibir un rescate ni de entrar en contacto con los familiares. Desaparecen sin dejar huella y las indefensas víctimas carecen de cualquier posibilidad de interactuar; probablemente, jamás serán rescatadas, y quedarán registradas como desaparecidos que se buscan, sus fotos serán exhibidas en alguna cartelera de estación de policía y sus familiares, sujetos a dolor y sufrimiento por años.
Una cosa es el cine y otra la realidad. Pero ¿son tan distintos? Una de las funciones del cine es la creación de conciencia, el acercar a los espectadores a duras realidades, de manera que aumenten los niveles de atención, de conciencia colectiva y los estados de alerta, para contribuir a que jamás sean aceptables tales prácticas degradantes y miserables.
Podamos entonces dar a esta cinta un poder simbólico. Una joven madre, empleada de una cafetería, sale con su pequeño hijo a disfrutar de una tarde libre en el parque de diversiones en Nueva Orleans. Ella está alerta, pendiente, pero en un ligero parpadeo sucede lo impensable, cuando una mujer se lleva al pequeño por medio de engaños y lo embarca en un carro manejado por su esposo y cómplice. La madre alcanza a darse cuenta y empieza una espectacular odisea que nos lleva por las carreteras y los pueblos de Luisiana en una especie de historia de carretera cargada de heroísmos y de hazañas.
Sucede que los secuestradores, esta vez, se llevaron al niño equivocado, tal como los piratas sicilianos secuestraron al personaje que definitivamente no convenía secuestrar. Es entonces, esta madre, un ser simbólico, dotada de enorme conciencia e invencible determinación. Nosotros como espectadores podemos ser testigos de la forma recursiva y tenaz como la madre persigue y de la forma igualmente recursiva como los malhechores eluden la persecución. También de la forma en que otras personas interpretan estas cosas, actuando e interfiriendo sin darse cuenta, porque cada quien anda en su cuento y esa es la principal ventaja de los criminales.
El chocante final nos revela mucho sobre el mal y sobre el bien y sobre la forma en que estos dos elementos interactúan y entendemos que la determinación, acompañada de la fe y del amor, puede obrar milagros. Milagros que van a estar al lado de los que es justo y de lo que es humano.
Trailer
Ficha técnica:
Secuestrado / Desaparecido (Kidnap), EUA, 2017.Dirección: Luis Prieto
Duración: 81 minutos
Guion: Knate Gwaltney
Producción: Gregory Chou, Lorenzo di Bonaventura, Erik Howsam, Joey Tufaro
Fotografía: Flavio Martínez Labiano
Música: Federico Jusid
Reparto: Halle Berry, Sage Correa, Lew Temple, Chris McGinn
Halle Berry sobre actúa demasiado en esta película