Críticas
Una sorpresiva y deliciosa venganza
Una joven prometedora
Promising young woman. Emerald Fennell. EUA, Reino Unido, 2020.
«Can you guess what every woman’s nightmare is?»
Cassandra, Promising Young Woman
Desde que Una joven prometedora (Promising young woman, 2020) empieza, queda claro el humor que va a manejar: la canción «Boys» de Charli XCX contrasta con varios hombres bailando. Pero no cualquier tipo de hombre, ellos son parte del «común»: ejecutivos de pantalón y camisa, gordos y flacos por igual, borrachos y moviéndose de forma poco agraciada. Ya sabemos entonces que esta película, el debut de la directora Emerald Fennell, estará cargada de humor negro, y lo que viene es una caja de sorpresas que no decepciona y un film que no disfrutaba con tanto gusto desde Jojo Rabbit (Taika Waititi, 2018).
El contraste siempre va a ser una herramienta narrativa: entre lo que dicen los personajes y lo que realmente hacen hay un inmenso abismo, pues vemos que Jerry (Adam Brody) le ayuda amablemente a una muy borracha Cassie (Una Carey Mulligan irreconocible y arrasadora) a salir del bar donde se acaban de conocer, él ofrece llevarla a su casa y aprovecha que está alicorada para abusar sexualmente de ella. O al menos ese era su plan, porque ahí es donde la historia gira y no va para donde ustedes creen, para nada.
Acá nos encontramos a una vengadora nocturna sin máscara ni súper poderes, solo con un fuerte deseo de aleccionar a los hombres abusadores que se encuentra en sus noches de fingir borracheras. Sus víctimas son el típico cliché del macho que engaña a su víctima, pretende estar enamorado de ella y llenarla de cumplidos solo para tener relaciones sexuales. Pero en la vida de Cassie aparece de repente Ryan (Bo Burnham), un viejo compañero de universidad que quiere ser su amigo, y posiblemente algo más. Sin querer, Ryan ha revolcado el pasado de Cassie y sus profundos deseos de venganza.
Esta fabulosa idea de la libretista y directora Emerald Fennell está desarrollada de una manera muy divertida, fresca y mordaz. Cassie es una mujer brillante que puede tener todo en la vida, pero simplemente no quiere. Algo le sucedió en el pasado que la llevó a retirarse de la carrera de medicina que estaba estudiando para trabajar en una cafetería por un salario bajo y vivir en la casa de sus padres a sus 30 años, una costumbre que puede ser considerada «fuera de lo normal» en la cultura americana. Y antes de la mitad de la película sabemos qué fue lo que la hizo cambiar, pero no es eso lo que realmente importa. El largometraje va más allá de la anécdota o del drama tradicional, planteando dilemas muy actuales y una pregunta muy importante que también ha rondado en mi cabeza por años: si los organismos indicados no hacen justicia en casos de abuso sexual, ¿podemos hacerlo nosotros, con nuestras propias manos?
Los diálogos son muy inteligentes porque usa la misma retórica que hemos oído siempre, cosas como «la mujer se puso vulnerable en esa situación», «se lo ha buscado», «es su culpa» y demás acusaciones donde siempre es la mujer la culpable, y le da la vuelta para su propio beneficio, incitando unas conversaciones que revelan a una Cassie muy inteligente, con los pies en la tierra y la claridad absoluta de la realidad en que todos vivimos y pocos hacemos algo al respecto. Saliéndose de los lugares comunes y proponiendo una historia que no deja piedra sin levantar, Fennell ha logrado un film que dará mucho de qué hablar y que la pone directamente en la carrera del Premio Oscar a Mejor Director, después de su nominación al Globo de Oro y más de una veintena de premios por este film, su ópera prima.
Hasta las canciones elegidas para la película, que incluye Stars Are Blind de Paris Hilton (Sí, recordemos que ella cantaba), versiones instrumentales de Toxic de Britney Spears y Angel of the Morning de Juice Newton para el fantástico final, son adecuadas para cada momento; no son para nada aleatorias, están pensadas por su letra y que nos hablan en subtextos acerca de todo lo que va ocurriendo, y son interpretadas únicamente por mujeres. La música incidental le da la tensión necesaria a esas escenas donde uno está pegado a la silla, sorprendido por el giro que la historia acaba de dar, uno tras otro en un ritmo vertiginoso y evidentemente bien calculado.
El casting incluye a una Jennifer Coolidge totalmente diferente a lo que ha hecho siempre, y pequeñas participaciones de conocidos intérpretes como Allison Brie, Alfred Molina, Connie Britton y otros más. Y esas apariciones son medidas y totalmente adecuadas, cortas pero sustanciosas, que le dan fuerza y verosimilitud a la historia a medida que avanza. Es sorprendente que Fennell haya convocado a esos actores y actrices con un presupuesto bajo (según declaraciones de la propia directora) y con solo 23 días de rodaje, algo que refuerza la calidad de la historia y el tratamiento que la directora le ha dado. Los resultados lo demuestran, con más de 7 millones de recaudación en un mundo que sigue encerrado por la pandemia del covid, y en el que la piratería sigue creciendo exponencialmente.
Muchos han llegado a compararla con Joker (2019), lo que me parece un gran desacierto, y la sinopsis corta de la película en Internet Movie Database se refiere a Cassie como «una mujer traumatizada», lo que me hace preguntarme, ¿realmente lo está? ¿Es Cassie tan solo una sociópata, o una vengadora al mejor estilo de Batman (O Batichica, en este caso)? ¿Y eso estaría mal, teniendo en cuenta la sociedad en la que vivimos hoy, llena de injusticias y decadencia? ¿Quién está libre de pecado para tirar la primera piedra, como dijo Jesucristo? Bueno, para eso queda la reflexión de esta brillante película, que sea el espectador quien decida el lado que mejor le parezca.
Trailer:
Ficha técnica:
Una joven prometedora (Promising young woman), EUA, Reino Unido, 2020.Dirección: Emerald Fennell
Duración: 113 minutos
Guion: Emerald Fennell
Producción: Emerald Fennell, Tom Ackerley, Ben Browning, Ashley Fox, Josey McNamara, Carey Mulligan, Margot Robbie
Fotografía: Benjamin Kracun
Música: Anthony Willis
Reparto: Carey Mulligan, Bo Burnham, Alison Brie, Laverne Cox, Jennifer Coolidge, Connie Britton, Alfred Molina, Chris Lowell, Adam Brody, Christopher Mintz-Plasse
Woww!! No la he podido ver, pero esta forma como hablas de ella Juan Camilo me hizo imaginar la secuencia y definitivamente debe ser una de esas obras que no pueden dejar de verse no sólo por que está dando de que hablar, sino porque nos permite identificar que como sociedad de verdad algo está pasando y no ahora hace mucho.