Críticas
Suspensos musicales y humanos
Coda
Claude Lalonde. Canadá, 2019.
La vida de un gran músico, sea ficción o realidad, está siempre llena de aventura y de sorpresas. Es que enfrentarse como solista a grandes auditorios, pendientes de cada nota, hambrientos de belleza y de perfección, en actitud de admiración en verdad, pero también de expectativa, dada las altas exigencias de cada concierto, pleno de momentos sublimes y de complejas filigranas, es todo un drama. Cuando el cine se acerca a esos dramas de la vida del artista, se acerca también, literalmente a la ejecución musical y nos pone en íntimo contacto con los instrumentos, con los gestos, con las manos, con la respiración, con el sentir del músico y nos damos cuenta de que, en verdad, debe existir una musa detrás de todo ello, algo mágico y divino, que mantiene la armonía, la melodía, la elegancia; algo que destila y que brota, llegando a nuestra propia y sensible alma.
De esa musa trata Coda, una preciosa película que nos acerca con nerviosismo a esas presencias, dado que el protagonista, un veterano y prestigioso pianista, está pasando por períodos de su vida en los cuales duda de sí mismo, se siente agotado y cuestionado. En realidad, no ha perdido sus brillos ni sus extraordinarias capacidades, que lo llevan a tocar de memoria en medio de aplausos y de reconocimientos, dejándose llevar en la programación de sus conciertos por un representante que lo idolatra y que lo cuida con extremas consideraciones, moderando sus caprichos de genio, de persona distinta, distante y solitaria. Pero, de forma inesperada, ha empezado a notar que, en momentos cruciales y finales de la ejecución, se escapa la musa, dejándolo miserablemente en silencio musical, aunque sea por instantes. Como en una coda inesperada, se ve obligado a una repetición y esto no lo soporta su genio.
Entonces surge un pequeño milagro en forma de mujer, una musa real, una hermosa reportera musical, sensible y atenta, capaz de acercarse al genio y soportar sus durezas y sus rechazos, simplemente porque está enamorada de la música, porque tiene vocación y paciencia a toda prueba, sazonada con ingenio y sentido del humor y habilidad empática. Un verdadero regalo de la vida para el pianista, regalo que poco a poco va aceptando, a medida que se enfrenta a sus propios demonios internos, con ayuda del paisaje, de las preciosas montañas de Sils María en Suiza, apoyado por los hermosos ojos de su musa y su sonrisa. No que llegue a recuperar la total confianza y a perder los miedos, pues sabe que es un pianista ya maduro y de cierta forma senil y que debe aceptar la despedida del mundo de las altas exigencias musicales, pero de alguna manera penetra en otro mundo, el de la cercanía con las altas exigencias de aceptarse a sí mismo como ser que ama y que es amado.
Quiero en este caso, detenerme un poco sobre los dos extraordinarios protagonistas de este filme. Se trata de artistas maduros y completos. Katie Holmes ha actuado con singular habilidad en filmes como Miss Meadows (2014), Todo lo que teníamos (2016) El secreto. Atrévete a soñar (2020) y en ellos es una mujer en verdad protagonista, que siente la necesidad de inspirar y de superar circunstancias mostrando el efecto de las energías internas. Patrick Stewart, famoso actor en Star Trek: La nueva generación (1987) y Star Trek: Némesis (2002), X-Men, varios episodios, Mentes maestras (1987) y otras muchas obras y series de TV, incluyendo numerosas ocasiones en las cuales anima con su voz, es un artista que se luce por su madurez, sin perder atractivo. Esta pareja sintoniza perfectamente y hace honor a unas frases notable del filme. Dice Henry Cole, el pianista: Soy un anciano; contesta ella, su musa, la escritora y periodista Helen Morrison: ¿Qué pasa? ¿Tienes algo en contra de las mujeres más jóvenes? Este intercambio es un perfecto resumen de lo que los espectadores advertimos: el acercamiento entre un anciano derrotado y temeroso y una mujer sensible, libre, delicada, pero atrevida.
En verdad una película puede ser valiosa meramente por la música de la amistad y del nacimiento del amor entre las personas, por las rutinas de tímido y respetuoso acercamiento que se basa en la admiración y en la esperanza. Y cuando es la música la que se coloca en el medio, enriqueciendo las magníficas escenas sonoras con el suspenso y lo inesperado, vale la pena el espectáculo.
Trailer:
Ficha técnica:
Coda , Canadá, 2019.Dirección: Claude Lalonde
Duración: 96 minutos
Guion: Louis Godbout
Producción: Nicolas Comeau
Fotografía: Guy Dufaux
Música: Guy Pelletier (editor musical). Toda la música de la película fue interpretada por el pianista Serhiy Salov
Reparto: Patrick Stewart, Katie Holmes, Giancarlo Esposito, Christoph Gaugler, Drew Davis
Excelente película…
Cómo se llama la canción del final??
Gracias
Excelente película…
De las mejores que he visto…
Cómo se llama la canción del final??
Gracias
Keyboard Sonata in D Minor, Kk. 1 (Allegro)