Críticas

Cariño, he perdido al perro

¡Por fin solos!

Darling Companion. Lawrence Kasdan. Estados Unidos, 2012.

El regreso de Lawrence Kasdan ha sorprendido a muchos y no precisamente de manera agradable. El hecho de que ningún estudio deseara financiar su nueva película no anunciaba un proyecto demasiado halagüeño. En Por fin solos no se aprecia apenas un atisbo de la genialidad de sus anteriores guiones, con los que fue reconocido en diversos géneros fílmicos.

A pesar de que el casting presagiaba una trama al estilo de sus films Grand Canyon (1991) o Reencuentro (The Big Chill, 1983), historias en las que sus guiones sabían captar la esencia de las emociones humanas entrelazadas, no vemos más que a una familia Kasdan (su mujer coescribe el guión de esta película) desentrenada, en un regreso al celuloide que nos deja fríos.

Por fin solos narra la historia de un matrimonio que decide adoptar a un perro que han encontrado abandonado en una autopista y al que llamarán (en un preludio de lo que será la carente originalidad de la totalidad de la trama) Freeway. El vínculo que Beth (Diane Keaton) mantiene con el perro es tan fuerte, que la desaparición del animal provocará su desestabilidad, afectando la relación con su marido Joseph (Kevin Kline). La hermana de Joseph, interpretada por Dianne Wiest, y su pareja, Russell (Richard Jenkins), les acompañarán en esta búsqueda.

Aunque cuenta con un excelente reparto de actores muy versados en películas cómicas, el film no encuentra su tempo ni su género y nos tiende una trampa con el protagonismo del perro para hacernos creer que se trata de una excusa para el desarrollo de las relaciones entre los personajes. Y no es así, de ninguna manera: a pesar de que algunos de los diálogos predecían un encuentro dialéctico interesante que podía despuntar a base de ironía y el choque de las personalidades de los personajes protagonistas, el perro es la excusa, no para las subtramas, sino para un film entero carente de ritmo y, sobre todo, de propósitos.  

Diane Keaton abusa, como ha venido siendo habitual en sus últimos films, de un histrionismo que ensombrece su personaje con altibajos emocionales y gestos, que si pretenden situarla en el eje de la comedia/drama de la película, no lo consiguen. Las interpretaciones de Kline y Jenkins son un pequeño respiro a la situación monotemática de la película. En las escenas en las que vemos a toda la familia unida, el espectador puede suponer que el plantel de secundarios iba a ser el encargado de sacar a flote el film, pero ni la presencia de Richard Jenkins, quien se ha convertido en el secundario salvador de muchas películas mediocres, alcanza para redimir esta historia de la familia Kasdan.

Kasdan introduce el personaje de una gitana con la intención de que pueda intensificar la unión entre los protagonistas y provocar situaciones cómicas, pero acaba convirtiéndose en un repetitivo recurso del guión para mover a los intérpretes hacia una búsqueda plana, sin tumbos ni giros argumentales, en la que la única emoción resulta ser el encuentro con dos carneros y la escena con una dislocación de hombro más larga jamás vista en la pantalla.

La película acaba siendo un despilfarro de buenas intenciones de los actores y nos muestra un retrato que, en ocasiones, sobrepasa la frontera de la comedia para rozar la zona de lo ridículo. Su ejemplo más notable podría ser la escena final, en la que apreciamos un resultado fallido en la manera de resolver el punto álgido de la historia, lo que provoca que el film termine siendo un fracaso de comedia, algo imperdonable, teniendo en cuenta los actores que en ella participaban y la calidad de Kasdan como guionista y director.

El síndrome del nido vacío, la entrada en la tercera edad (tienes un enfado hormonal- le dice Joseph a Beth), el instinto protector de la familia que se une en la búsqueda del animal, sin cuestionarse si la desesperación de Beth es o no exagerada, son algunos de los temas que acompañan la incesante búsqueda de Freeway. Sólo el marido será capaz de cuestionar el valor del amor que su esposa siente por el perro, hecho que también llega a plantearse el espectador y todos alzarán miradas desaprobadoras contra él. ¿Acaso soy un monstruo por ser realista?  La escena en la que Joseph se sincera con su esposa es de los momentos más creíbles del film. La crisis de la pareja se ve acentuada por el incidente, que amenaza con abrir una brecha en su relación.

En una nota que el propio Kasdan escribió para la presentación de la película, afirmó que la historia de Darling Companion surgió de una experiencia muy similar que vivieron él y su esposa. Al parecer en un punto del guión, los sentimientos personales nublaron la objetividad de lo que podía haber sido una película, cuanto menos, entretenida. Si de algo peca esta historia es de abusar de la paciencia del espectador, llevándolo al límite de su protagonista y eso no era necesario ni consigue que aquel se identifique con la situación, sino que provoca que la empatía que pudiera haber surgido en algún momento acabe por desaparecer, como el perro. 

Es posible que únicamente encaje con aquellos amantes de los perros, y aún me genera dudas. Teniendo en cuenta que han transcurrido nueve años desde su último trabajo como director, Por fin solos supone el regreso más templado de los últimos años, de una figura reconocida que en su día dirigió y escribió films como El turista accidental (The Accidental Tourist, 1988), Wyatt Earp (1994) o Fuego en el cuerpo (Body Heat, 1981).

Tráiler:

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Ficha técnica:

¡Por fin solos! (Darling Companion),  Estados Unidos, 2012.

Dirección: Lawrence Kasdan
Guion: Lawrence Kasdan, Meg Kasdan
Producción: Kasdan Pictures, Likely Story, Werc Werk Works
Fotografía: Michael McDonough
Música: James Newton Howard
Reparto: Diane Keaton, Kevin Kline, Dianne Wiest, Richard Jenkins, Charles Halford, Elisabeth Moss, Sam Shepard, Mark Duplass, Ayelet Zurer, Lindsay Sloane, Jay Ali, Robert Bear, Kasey, Paul Kiernan, Jericho Watson, Yolanda Wood, D.L. Walker, Dina Goldman, Ruben Barboza, Aline Andrade, Jon Kasdan, Mark Robinette, Craig Miner, Ryan Shupe, Anne Cullimore Decker, Anthony Bregman, Tod Huntington, Jason Jensen, Christina Thurmond, Lorry Houston, Jon Florence, Jan Broberg Felt, Zack Phifer, Dennis Record

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