Borderlands

Apenas vi el trailer, imaginé algo parecido a Guardianes de la Galaxia (Guardians of the Galaxy Vol. 1, James Gunn, 2014), pero en las manos de Eli Roth, el actor, libretista y director americano, al que le tenía mucha fe por su experiencia en el cine de terror. Además, con Cate Blanchett y Jamie Lee Curtis, ¿qué podía salir mal? Desafortunadamente, todo fracasó. Borderlands (Eli Roth 2024), es una cinta que terminó su rodaje en el verano de 2021 y se guardó en una misteriosa caja de Pandora, ese lugar donde caen los proyectos de Hollywood que no tienen futuro, y de donde nunca debió salir. A pesar de las dos semanas de escenas nuevas que Tim Miller hizo en 2023 (Roth ya estaba rodando una nueva cinta), la película nunca termina de salirse de los clichés y lo predecible, volviéndose tediosa. Según el mismo Roth, la versión original era menos violenta que la versión que algunos tuvimos la desgracia de ver en cines, pues él quería una película “para la familia”. No sé si el director entendió que estaba basado en un videojuego que no es para niños y que su pálido acercamiento en la pantalla grande fue un desperdicio de dinero y talento, que mató de inmediato el futuro de una saga que triunfó en el mundo de los gamers.

La cinta nos presenta a Lilith (Blanchett) como una cazarrecompensas que debe regresar a su planeta de origen, Pandora, el lugar más caótico de la galaxia, para rescatar a la hija de Atlas (Edgar Ramírez), el hombre más poderoso del universo. Como un tradicional viaje del héroe de Vogler, Lilith primero se rehúsa y termina aceptando su misión, y debe tener un equipo a su lado, por supuesto, entonces el guion le presenta los más incompetentes de todos: Roland, un mercenario tan poco interesante como el actor que lo interpreta (Kevin Hart); Claptrap (Jack Black), un insoportable robot que sabe más de la cuenta y jamás que calla; Krieg (Florian Munteanu), un gigante musculoso poco encantador; y Tannis (Curtis), una científica más que extraña que uno no entiende cómo ha sobrevivido tanto en Pandora. Una versión barata de los Guardianes de Marvel.

El objetivo de la misión se cumple pronto, Tiny Tina (una insoportable Ariana Greenblatt) es encontrada (y creo que no es un spoiler), y entonces, ¿qué pasa ahora? Todo se convierte en un desorden absoluto de líneas argumentales predecibles, unas escenas de acción bastante aburridas y un final que deja bostezando al que aún no se quedó dormido en la sala (escuché varios ronquidos a mi alrededor cuando la vi en el cine). Ningún personaje logra generar interés ni mucho menos algún tipo de identificación, todos son salidos de los estereotipos, y los intérpretes hacen lo que pueden con el material que tienen. Ni la dos veces ganadora del Oscar (que deberían haber sido tres) logra salvar la cinta, Blanchett y su horrible peluca roja no pueden hacer mucho por una historia condenada desde su guion.

No entiendo cómo Craig Mazin, el brillante libretista de las exitosas series de televisión de HBO, Chernobyl (2019) y The Last of Us (2023), estuvo como libretista en algún punto de la cantidad de reescrituras que tuvo esta cinta. Tan decepcionante le pareció, que pidió que su crédito fuera removido de la versión final del filme… Eso ya es demasiado. ¿En qué momento se alejaron TANTO de la fuente original y crearon una historia plana, con humor escatológico barato y efectos especiales mediocres? ¿Dónde quedaron los universos y las armas que se destacaron en e videojuego que inició en 2009, con un presupuesto de casi 120 millones dólares? ¿En qué gastaron tanto dinero, entonces? Porque no se ven reflejados en la pantalla grande.

Creo que el gran pecado acá es la simpleza de la historia. Y no porque sea malo contarla de esa forma, el problema es el público al que va dirigida esta cinta. No son los niños a los que se le vende esta película desde su tráiler, son los jóvenes y adultos que crecieron con el videojuego y esperan ver historias complejas, entretenidas pero profundas, bien trabajadas… Y acá se siente que todo quedó a medias, con buenas intenciones que se quedaron en pocos resultados tangibles. Las adaptaciones de videojuegos se han puesto de moda en los últimos años, subiendo el nivel cada vez más con éxitos comerciales como Super Mario Bros: La Película (The Super Mario Bros. Movie, Aaron Horvath & Michael Jelenic, 2023) y Sonic: La Película (Sonic the Hedgehog, Jeff Fowler, 2020) en cine, y Fallout (2024) en televisión. La calidad ha sido elevada y el público ya no está dispuesto a recibir algo de menor condición.

En su estreno en salas, Borderlands recibió 0% en Rotten Tomatoes, pésimos comentarios de los seguidores del juego y de la crítica especializada por igual. ¿Por qué fui a verla al cine, entonces? No lo sé, quise tenerle fe y pensar que todos estaban equivocados… Pero, no. Me uno a las críticas negativas y a la decepción que se siente ir al cine y salir aburrido, con ganas de que te devuelvan tu dinero y el tiempo perdido.

Tráiler: