Series de TV
Dates
Dates es una serie sofisticada, moderna y cosmopolita que tiene la ciudad de Londres como escenario único en el que se desarrollan las citas a ciegas que dan título a la obra, creada por Bryan Elsley, responsable de Skins. A lo largo de nueve capítulos de veinte minutos de duración cada uno, se va creando una serie de relaciones entre parejas que han conseguido una cita a través de una página web. Sin duda, la actriz madrileña Oona Chaplin, a quien pudimos ver en la tercera temporada de Juego de tronos, es uno de los principales atractivos de Dates; de hecho, su personaje, Mia, aparece en cinco de los nueve episodios.
La primera temporada de esta serie británica se emitió por Channel 4, y en España se ha podido ver en Canal+, si bien estará disponible en su plataforma Yomvi hasta principios de 2015. Con un formato aparentemente modesto, lejos de ciertas superproducciones televisivas, Dates explota dos valores fundamentales: guiones sólidos e interpretaciones brillantes. El resultado es muy atractivo, porque la serie nos pone frente a personajes no muy distintos a nosotros mismos, con una vida profesional más o menos estable, pero que se encuentran solos en mitad del viaje de la vida y buscan a alguien con quien compartir el resto del camino o, al menos, pasar un buen rato.
Cada episodio plantea un encuentro entre dos desconocidos, aunque algunos de ellos vuelven a reaparecer con otras parejas o a reencontrarse con alguna cita anterior, lo que dota a esta serie de un arco argumental mínimo, si bien cada episodio es autoconclusivo y puede ser visto independientemente de los demás. El título de cada uno de los episodios refleja la forma en que se entrelazan las vidas de los personajes: “Mia & David”, “Jenny & Nick”, “Mia & Stephen”, “Erica & Kate”, “David & Ellie”, “Erica & Callum”, “Stephen & Mia”, “Jenny & Christian” y “Mia & David”. Los personajes más recurrentes, por tanto, son Mia (Oona Chaplin), David (Will Mellor), Stephen (Ben Chaplin), Erica (Gemma Chan) y Jenny (Sheridan Smith).
La galería de personajes es lo suficientemente amplia como para que los espectadores puedan identificarse más con unos o con otros. Quizás los más sofisticados y misteriosos sean los de Mia y Stephen, aunque por razones distintas. Mia, de todas maneras, sigue siendo un misterio cuando acaba la serie, pero Stephen, que es médico, pasa de ser un profesional frío, distante y calculador a mostrarse como un padre abnegado; se produce en él, por tanto, una dignificación del personaje. David es un joven camionero viudo al que su hermana no para de buscarle citas. Jenny es una joven profesora de infantil que tiene un pequeño problema de cleptomanía, mientras que Erica no puede vivir libremente su homosexualidad a causa de su familia.
Ahora bien, si hay alguien que tiene un magnetismo especial es Oona Chaplin, y resulta muy difícil como espectador no caer rendido a sus encantos, ya que en algunos momentos, sobre todo del primer episodio, parece que no está hablando con David, que es a quien tiene delante, sino a los espectadores, porque la cámara está prácticamente situada en el lugar que ocupa David. Más adelante, en el tercer episodio, Oona Chaplin y Ben Chaplin mantienen un auténtico duelo interpretativo, que gana provisionalmente ella, aunque es necesario ver los demás episodios para comprobar que el personaje de Stephen tiene un recorrido más largo y complejo.
Sin duda, Dates es una serie que aprovecha muy bien las limitaciones de su propio formato, que tiene una gran ventaja, eso sí, y es que, al presentar a personajes distintos cada vez, puede ofrecer galerías totalmente renovadas en temporadas posteriores, aunque en esta primera temporada hay un par de personajes que bien merecen ser recuperados en próximas entregas. Y todo ello en pequeñas dosis de veinte minutos.
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