Críticas

El planeta de la supervivencia

El reino del planeta de los simios

Otros títulos: El planeta de los simios: nuevo reino.

Kingdom of the Planet of the Apes. Wes Ball. EUA, 2024.

Cartel de El reino del planeta de los simiosCreo que al hablar de esta película, vale la pena mencionar que ella pertenece, de algún modo, a una extensa serie de filmes de ciencia ficción producidos en Estados Unidos, que también incluye libros, series de TV y libros de comics. Su origen tiene que ver con la novela La Planète des singes, 1963, de Pierre Boulle, que fue llevada al cine en 1968, como El planeta de los simios, película muy exitosa en todo sentido.  Luego vinieron (1970 a 1973) Regreso al planeta de los simios, Huida del planeta de los simios, La rebelión de los simios y La conquista del Planeta de los Simios. En 2001 apareció una nueva versión, con elementos renovados, El Planeta de los Simios, de Tim Burton. Le siguieron El origen del Planeta de los Simios, 2011, El amanecer del Planeta de los Simios, 2014, y La guerra del Planeta de los Simios, 2017. Este grupo de películas ha sido relativamente exitoso y ha permitido explorar diversos campos, naturalmente relacionados con los cambios de la raza humana, pasada y futura, sus relaciones con los animales y la evolución, entre muchos otros.

Esta nueva película transcurre en el futuro, en un mundo dominado por los simios, en el cual los humanos apenas si aparecen, viviendo esclavizados o escondidos, bajo la esperanza de volver a ser la especie inteligente dominante, pero sin que esté nada clara la ruta para lograrlo, dado que los humanos han perdido u olvidado su superioridad tecnológica y organizacional. Entonces esta historia esta fundamentalmente centrada en los simios y en sus luchas internas entre grupos, algunos que viven de forma pacífica, comunitaria, bastante familiar, a modo de algunas comunidades nativas indígenas humanas; en contraste con grupos de simios agresivos y dominantes, que practican la violencia contra otros simios y contra los grupos de humanos primitivos y dispersos que han retrocedido a una existencia nómada, desordenada, sin lenguaje y sin estructuras orgánicas. Perdidos, ocultos en algún lugar, recuperando espacios y tecnologías, hay grupos de humanos aparentemente más civilizados, pero poco nos dice el filme de ellos y la trama apenas si los toca, quizás insinuando que se acerca algún tipo de reconquista del antiguo poder de los seres humanos, en episodios futuros de la saga.

El reino del planeta de los simios

Plantea el filme en sus mejores y más creativos momentos  una curiosa simbiosis entre las imponentes águilas que viven en las alturas y los simios de las tribus pacíficas. Ellos han aprendido a trepar por los riscos, donde las águilas tienen sus nidos, para tomar, bajo graves peligros y riesgos, algunos de los huevos, de forma respetuosa, tal que no se amenace la supervivencia de la orgullosa y altiva especie, para llevarlos e incubarlos en sitios especiales, dando lugar a águilas esclavas –amistosas y fieles al servicio de estos simios–, para pescar y cazar.

Transcurre entonces el filme, acercándonos a las intimidades de buenos salvajes de los simios pacíficos, que funcionan con sus ancianos sabios y sus familias unidas y protectoras, pero siempre bajo la amenaza de los malignos y arbitrarios simios dominantes, que perdieron antiguos rumbos de civilización, para convertirse en dañinas e invasoras hordas.

Es evidente que se está planteando la entera posibilidad de que los animales lleguen algún día a ser la especie dominante, pensando que, por alguna razón, por ejemplo, algún tipo de virus, o como consecuencia de las guerras o de las armas, los seres humanos retrocedan en la escala evolutiva y dejen los espacios para lo que sería la natural evolución de animales como los homínidos, que los lleve a las costumbres y modos cotidianos que antes eran exclusivos de la especie humana e inclusive a superarlos. Pero si este filme se refiere a estas posibilidades, la verdad es que cuando ello sucede, pareciera que nada especial se va a lograr, ya que el planeta, ahora en manos de los simios, se mantiene como un campo de batalla entre la civilización y la barbarie, entre el poder y la debilidad, entre victimarios y víctimas; de hecho, nada que supere a los momentos espectaculares de la cultura humana, con su arte, su música, poesía, religión, espiritualidad, ciencia e innovación.

Kingdom of the Planet of the Apes

Y no es que los simios del filme carezcan de virtudes especiales. Entre algunos de ellos reinan el amor y la amistad; hay objetivos y proyectos; hay sueños y desafíos; algún filósofo aconseja; algunas tradiciones y simbolismos se han implantado. Pero es evidente que no ha penetrado en ellos el alma, ni el sentido profundo, ni la trascendencia, que las musas no han visitado suficientemente los lugares en que estos seres viven, agobiados por la diaria supervivencia. Entonces cabe preguntarse qué proyecto se imaginan aquellos que etiquetan a la raza humana como una plaga destructora y torpe, inferior a las mascotas, a los animales, a las plantas, inferior y débil también frente a la Inteligencia artificial y a los robots, plaga que debe someterse, menguarse y quizás desaparecer,  siguiendo las inspiraciones e instrucciones de los modernos iluminados transhumanistas, ecologistas y animalistas extremistas.

Trailer

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Ficha técnica:

El reino del planeta de los simios  / El planeta de los simios: nuevo reino (Kingdom of the Planet of the Apes),  EUA, 2024.

Dirección: Wes Ball
Duración: 145 minutos
Guion: Josh Friedman, Rick Jaffa, Amanda Silver, Patrick Aison
Producción: Joe Hartwick Jr., Rick Jaffa, Amanda Silver, Jason Reed
Fotografía: Gyula Pados
Música: John Paesano
Reparto: Owen Teague, Freya Allan, Peter Macon, Eka Darville, Kevin Durand, William H. Macy, Neil Sandilands, Sara Wiseman, Dichen Lachman

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