Reseñas de festivales
Las lágrimas
Lamentablemente, los hogares rotos son cada vez más comunes en el mundo. En la película de Pablo Delgado, Gabriel y Fernando son dos hermanos que padecen los estragos de formar parte de una familia que está fracturada. Hijos de una madre ausente que se encierra en su recámara, Fernando se ha volcado al alcoholismo y la drogadicción, y Gabriel –con sus escasos diez años- tiene que valerse por sí mismo en la medida de sus posibilidades.
Un día, como cualquier otro, ambos hermanos saldrán a disfrutar de tiempo juntos, y se encontrarán con la realidad de sus personalidades y defectos, al punto en el que ambos verán de lo que están hechos y notarán la importancia de sus lazos filiales, que sobrepasan las fronteras de las diferencias, la edad y la experiencia.
Este que es el quinto largometraje de Delgado, que con sus 63 minutos, es suficientemente cautivador y goza de las actuaciones naturales de Fernando Alvarez y Gabriel Santoyo, quienes imprimen a la película una calidez que, en conjunto con la fotografía, le da un ambiente íntimo a Las Lágrimas.