Muestras, Festivales y Premios
Palmarés premios Fugaz 2018 de cortometrajes
El corto español parece vivir un buen momento, a pesar de los bamboleos de la industria del cine patrio. En esa tesitura aparecen los premios Feroz, que apuntan alto para convertirse en el referente en cuanto a galardones relacionados con este formato. La selección de nominados a las distintas categorías da buena muestra del estado de forma del corto nacional, con distintas propuestas de gran calidad, demostrando el mimo y esfuerzo en constante evolución que hay alrededor de producciones cada vez más cuidadas.
El gran triunfador de la edición de los Fugaz de 2018 ha sido Rodrigo Sorogoyen con el título Madre. Director todoterreno, que ya ha demostrado su solvencia en cualquier formato, su paso por el corto ha despertado gran interés por parte de la crítica y el público, y se ha hecho con galardones de gran importancia, a los que se suman los conseguidos en estos Fugaz 2018.
El 24 de mayo se supo por fin qué cortos y profesionales del medio se harían con los galardones, en una gala ubicada en el Palacio de la Prensa de la capital española, presentada por el actor Diego Arjona.
Madre se alzó con los premios al Mejor Cortometraje, Mejor Dirección, Mejor Guion y Mejor Actriz (Marta Nieto). Arrasó la tensa apuesta de Sorogoyen ante los profesionales llamados a elegir entre la enorme calidad de los candidatos presentados en esta edición.
El premio al Mejor Actor en esta ocasión recae en las manos de Carlos Kaniowsky, protagonista de Adivina, corto que también se hizo con el galardón en la categoría a la Mejor Dirección de Arte. En la categoría de Mejor Fotografía y Mejor Banda Sonora Original, los respectivos ganadores fueron Miguel Ángel Viñas y Luis Hernaiz, ambos profesionales implicados en el corto Exhalación, una de las propuestas más audaces de la noche.
Caronte, dirigida por Luis Tinoco, fue premiada en las categorías de Mejor Sonido y Mejores Efectos Audiovisuales. Mejor Vestuario y Mejor Maquillaje y Peluquería se quedaron en manos de Pepe Vázquez y Yolanda Piña, encargados de la ambientación fantasmal de La dama de sal.
Nuestro viejo (y el mar), de Lander Camarero, se llevó a casa el premio a la Mejor Dirección de Producción, gracias al trabajo de Gorka Zalacaín en esa pieza clave del engranaje de una película. Verónica Callón, por su parte, se hizo con el galardón correspondiente a Mejor Montaje por el cortometraje dirigido por Víctor E. D. Somoza, Ni una sola línea.
El premio al Mejor Director Novel recayó en Joan Vives, tras la cámara en El escarabajo al final de la calle. Pedro Vikingo conseguía con La pureza el trofeo a Mejor Cortometraje Documental, mientras la que hermosa curiosidad que supone Un día en el parque, dirigida por Diego Porral, se convertía en el Mejor Corto de Animación.
Por supuesto, el largometraje también tiene un hueco, a pesar del protagonismo indiscutible del formato corto en el espíritu de la gala. Fue Muchos hijos, un mono y un castillo, de Gustavo Salmerón, auténtico fenómeno cinematográfico, el que se llevó el gato al agua en la gala de 2018. El veterano cineasta Javier Fesser recibió el premio Fugaz Homenaje, distinción que hace reconocimiento a la carrera de este particular cineasta, nombre clave del cine español reciente.
Premios como los Fugaz demuestran la enorme presencia, dignidad y futuro que el formato corto ostenta en España. Contra viento y marea, son decenas los directores y productores que arriesgan a la búsqueda de nuevos modelos cinematográficos con la libertad que regala el pequeño formato. Los galardonados de este 2018 son ejemplo de lo que se puede encontrar en el medio, con nombres de sobra conocidos aderezados con la presencia de nuevos talentos emergentes que darán mucho que hablar. Los Fugaz, por su parte, siguen en crecimiento exponencial, tanto en calidad como en presencia, lo que augura el éxito de estos galardones y su inestimable voz en el panorama del cortometraje español.