Reseñas de festivales
Seduced and abandoned
El realizador James Toback y el actor Alec Baldwin buscan desesperadamente fondos para financiar su próximo proyecto: una película de espionaje y erotismo ambientada en Irak, que es al mismo tiempo una remake de El último tango en París. Ambos viajan al Festival de Cannes y comparten almuerzos con productores e inversionistas, a quienes intentan convencer de que aporten 25 millones de dólares para el emprendimiento. Las mesas de negociación son las terrazas con vistas a la Riviera Francesa, los enormes yates, las fiestas nocturnas, las suites de los hoteles. Marilyn Monroe observa desde los imponentes afiches del glamoroso festival, mientras Toback y Baldwin van conociendo todas las caras posibles de la negación por parte de los magnates del cine, al punto tal que especulan con asaltar a los concurrentes de una de las tantas fiestas de gala del glamoroso festival. En el medio mantienen conversaciones con Coppola, Bertolucci, Polanski y Scorsese, con quienes discuten apasionadamente sobre el pasado y el presente del cine, sobre cuáles son las necesidades de filmar y las prioridades de los estudios actuales. Es probable que ninguno de los productores acepte financiar el proyecto, o que en realidad todo se trate de una enorme broma por parte del director y su protagonista, pero en su lugar nos quedan unos apuntes obsesivos de Toback sobre la muerte y el sueño cumplido de Baldwin por usar música de Shostakovich para la película. Seduced and Abandoned debe ser la más feliz y la más cinéfila de las películas de esta edición del Bafici, a la vez que da cuenta de un panorama desolador para los cineastas, exhibiendo las eternas dificultades que los apasionados deben sortear para concretar sus proyectos frente a los intereses del mercado. Un buen dato que les brindará la película es que no elijan a Neve Campbell como compañera femenina del protagonista.