Críticas

Libera nos a malo

The Apprentice: La historia de Trump

Otros títulos: El aprendiz.

The Apprentice. Ali Abbasi. Canadá. Dinamarca, Irlanda, EUA, 2024.

Hay que preguntarse, a veces, si el ser humano nace o se convierte en (el) malo. Una cuestión, por supuesto, que va más allá del simple dar una respuesta a secas, ya que subraya la necesidad de analizarnos en cuanto elementos tanto biológicos como sociales. Y es así que, como es normal, tenemos que darnos cuenta de que las cosas no son simples y necesitan un largo análisis del cual quizás no se logre extraer un juicio definitivo. Algunos afirman que la visión de lo biológico (a lo mejor desde un punto de vista de “alma”) se refiere a una concepción de carácter conservador, mientras que la de lo social a una de tipo más liberal, izquierdista. Sería entonces imposible hablar, en el primer caso, de la posibilidad de cambiar, ya que nuestro patrón sería inmutable, mientras que en el segundo nos acercaríamos a las ideas de que a través del diálogo y de compartir experiencias todos tendríamos la capacidad de mejorar. Dos ideas, entonces, que se definen por su oposición y que llevan a tener diferentes maneras de analizar y aceptar al ser humano dentro de lo que es no solo su sociedad, sino su contexto cultural.

¿Qué es lo que encarna Trump? Personaje horrible, representación del concepto de vacío moral, intelectual, humano, demostración de que muchas veces los mediocres son los que más fortuna tienen en el mundo, este hombre no es un héroe ni un monstruo, sino uno de los muchos personajes que la historia va a recordar simplemente como rareza (de haber sido dos veces presidente, por supuesto, sin que, efectivamente, tenga las cualidades necesarias para el cargo). Trump simplemente es, se podría decir, y terminar la frase así para que cada persona elija su continuación. “Es” en el sentido de ser, existir, y de formar parte del conjunto de seres humanos del cual cada uno de nosotros es un engranaje, con nuestra necesidad de comer, beber, respirar, defecar, hablar, discutir. Y, por supuesto, Trump es en el sentido de existir solo él, como si los otros nada fuésemos, otorgando a las personas el hecho de funcionar como simples piezas de un juego para llegar allí donde más poder se pueda tener, tan solo por una cuestión de imagen.

Es también un juego de apariencia, entonces, de lo que una persona es (otra vez el verbo ser) y lo que quiere que las otras creen que sea. Si la narración funciona, entonces, en este cuento biográfico, es porque se quiere dar una lectura que más a la realidad se ajuste, que pueda enseñar quién es efectivamente el hombre “Trump” y no la figura simbólica. Y es así cómo todo lo que le permite convertirse en un personaje mediocre, cutre y ridículo se amontona dentro de una serie de experiencias que nos llevan a preguntarnos si él ya era así antes o si simplemente se ha ido construyendo su persona dentro del contexto de eventos que lo han formado hasta hoy. Terrible pensar, entonces, cuál puede ser la respuesta, mientras vemos como alguien inicialmente, quizás, humano se transforma en algo insufrible, por lo menos desde un punto de vista ético, moral, de simple decencia. ¿Es el poder que corrompe o son las personas malas que lo contaminan? Machiavelli, a lo mejor, nos habría podido dar una lectura similar a la de Abbasi del personaje “Trump”, un príncipe que está en busca de su reino.

Es una película que nos provoca malestar, sobre todo en relación con la realidad presente. Necesaria, por supuesto, quizás fundamental, es probable que en el futuro vaya a tener más importancia, cuando la separación temporal (panta rei o, más simplemente, antes o temprano todos morimos, como les pasó a Franco, a Mao, a Stalin, quienes ahora solo son polvo sin valor, incapaces de ordenar a la muerte que no se los llevara, con gran felicidad por parte de la mayoría de la población) permita alejarse del hic et nunc que nos ofusca los ojos. No es una historia completa, por supuesto, ya que solo le interesa un trozo de la (larga) vida de Trump, y ya resulta bastante para darnos una idea de lo que es, de como se ha ido construyendo su propia persona, su yo, su horrible mediocridad y su inútil egolatría. Libera nos a malo, podríamos decir, del mal de la vacuidad, de los que quieren tener el poder de hacer lo que quieran, sin darse cuenta de que su vida, detrás de la fachada, es algo que ninguna persona sana querría experimentar.

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Ficha técnica:

The Apprentice: La historia de Trump  / El aprendiz (The Apprentice),  Canadá. Dinamarca, Irlanda, EUA, 2024.

Dirección: Ali Abbasi
Duración: 123 minutos
Guion: Gabriel Sherman
Producción: Daniel Bekerman, Amy Baer, Jacob Jarek, Tony Grier, Julianne Forde, Ruth Treacy, Louis Tisné
Fotografía: Kasper Tuxen
Música: Martin Dirkov
Reparto: Sebastian Stan, Jeremy Strong, Maria Bakalova, Martin Donovan

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