Críticas
Terror y comedia negra: primer y segundo plato de una cena poco convencional
Tú eres el siguiente
You're Next. Adam Wingard. EUA, 2011.
Si existiese una lógica que actuase tras los estrenos de la cartelera como factor que determina qué películas consiguen cruzar la línea que separa el circuito festivalero de la distribución en salas comerciales, en muchos casos veríamos que no está cimentada ni sobre el sentido común ni sobre la estrategia comercial.
Tú eres el siguiente, cinta que Lionsgate ha recuperado después de dos años de su adquisición, ha logrado un estreno a gran escala que destaca y sorprende si atendemos al perfil del film. Y es que son contadas las ocasiones en las que hemos podido visionar en multisalas un producto que lleve tan marcado el sello de festival especializado de cine fantástico. Adam Wingard, junto a su inseparable guionista Simon Barret, presenta con este, su sexto largometraje. Una cinta enmarcada en el contexto del subgénero mumblegore con el que Wingard se ha identificado en toda su filmografía, cuya condición ha querido definir más si cabe, al incluir en el reparto a los directores Ti West y Joe Swanberg o a la incursión de la actriz Barbara Crampton (Re- Animator, Stuart Gordon, 1985). Pero aunque nos queda bien claro cuál es el horno del que sale, aquí las señas de identidad que conectan con el mumblecore y el gore son más difusas, lo que la convierte en un producto mucho más asequible para un público generalista. Sin duda, es el terror uno de los géneros que mejor sabe reírse de sí mismo y parodiar los recursos y tópicos de los que el registro adolece. Simon Barret los conoce a la perfección y los aprovecha como guiño al espectador acostumbrado a la broma macabra, pero a su vez se muestra indeciso y ante los dos caminos principales que podía tomar para acometer el tratamiento del humor, mediante los diálogos y las situaciones que viven sus personajes, opta por un término medio que da como resultado un mix del que sale airoso, con elementos tan dispares como el tono del slasher más descafeinado que podemos encontrar en secuelas como Scream (Wes Craven, 1996) o Sé lo que hicisteis el último verano (Jim Guillespie, 1997) –la vacuidad de los personajes, los diálogos sin vida, las máscaras y hasta las pintadas en la pared que advierten a la siguiente víctima de su destino– y la proximidad a películas donde la comedia negra encuentra su mejor exponente, como Dead End (Jean-Baptiste Andrea, 2003) o la británica Down Terrace ( Ben Weatley, 2009).
Desde un punto de vista argumental, guarda parentesco con aquellos films que narran la angustia aterradora e impotencia que produce un allanamiento de morada. Las víctimas, los dueños del hogar que quedan sumidos en la vulnerabilidad más absoluta tras arrebatárseles, en solo un instante, su seguridad y protección.
Los asaltantes pueden mostrarse a cara descubierta y actuar con artimañas nada efectistas (Funny Games, Michael Haneke, 1997) o, de manera encubierta, con máscaras que buscan desconcertar y proteger la identidad. Por consiguiente, ocultar la motivación de la agresión –si es que existe– (Ellos, David Moreau, 2007, Extraños, Bryan Bertino, 2009, Secuestrados, Miguel Ángel Vivas, 2010, y la más reciente, The Purgue, James DeMonaco, 2013).
Wingard satiriza y expone en la diana a una familia disfuncional con mucho dinero, que se reúne para la celebración del aniversario de bodas de los padres en una casa de campo. La coartada perfecta para asegurar la asistencia de todos los miembros. Una cena donde los comensales no llegarán a probar el postre. Los arquetipos funcionan en la explotación del rol más pretendidamente previsible y la audiencia entra sin mucho esfuerzo en ese juego del “todos sabemos lo que va a ocurrir y nos reímos porque lo sabemos”, que alcanza su mejor momento en el acto final, cuando las cartas están sobre la mesa y la violencia se torna más gráfica. El único puntal que va en contra de los estándares que sigue el film es el que representa a la heroína interpretada por la australiana Sharni Vinson, cuando desenfunda toda clase de malabares rebosantes de sadismo al poner en pleno rendimiento el brackground guerrillero aprendido en su infancia. Una buena manera de dejar a un lado el tufo sexista de los slasher ochenteros a los que emula, algo que el mejor cine de terror europeo puso en marcha hace ya tiempo.
Tráiler:
Ficha técnica:
Tú eres el siguiente (You're Next), EUA, 2011.Dirección: Adam Wingard
Guion: Simon Barrett
Fotografía: Andrew Droz Palermo
Música: Mads Heldtberg
Reparto: Sharni Vinson, Nicholas Tucci, Wendy Glenn, AJ Bowen, Joe Swanberg, Sarah Myers, Amy Seimetz, Rob Moran, Barbara Crampton, Ti West, Simon Barrett, LC Holt
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