Reseñas de festivales
Yo soy José Mujica… el poder está en el corazón
Uno de los recursos atractivos del documental biográfico es la relevancia de la personalidad que desea abordar. Su elección puede jugarle a favor o en contra, pero en este caso, el carisma y la singularidad del presidente de Uruguay, José “Pepe” Mujica, lo transforma en un recorrido apasionado por la vida de un líder emblemático.
Realizado en el curso de los últimos ochos años e inspirado en el texto de Hanna Arendt “¿La política todavía tiene sentido?”, la directora se pregunta hasta dónde la militancia política logra cambios sustanciales en el devenir democrático de un país.
El documental comienza con una voz en off que alude a la manera especial de hablar de Mujica. Una afirmación certera, pero que no aporta nada al discurso que vendrá. A partir de allí, el film se estructura sobre la base de una larga entrevista con el ex líder tupamaro, donde se rescatan algunas frases utilizadas como separadores entre las escenas. Fotos de su infancia y de sus padres acompañan el recorrido por su vida. También se destacan conceptos políticos, como “la democracia liberal”, que caracterizan estos tiempos, según Mujica. Al reportaje que vemos construirse, se intercalan imágenes de archivo de sus discursos y un muestrario centellante de imágenes de paisajes o lugares destacados del Uruguay; país al que muestra de forma didáctica en varios mapas, como si implícitamente se promocionara turísticamente el lugar, más allá de la connotación política del film. En esa vorágine narrativa con tintes de campaña electoral hay espacio también para cierto lirismo audiovisual.
El sonido no es del todo claro, y se pierden detalles importantes. Resulta paradójico que dada “esa manera de hablar especial de Mujica” aludida al comienzo y al final, no se haya contemplado el uso de subtítulos. La elección de los planos y la puesta de cámara resaltan la figura del mandatario iconoclasta al que enmarca metafóricamente con el fuerte sonido de latidos. “El poder está en el corazón”, como su título lo indica, y Lucía Wainberg lo muestra de esa manera porque no sólo rescata al político de fuertes convicciones ideológicas, sino al hombre de ojos pequeños y rasgados que toma mate y ama su país.
Una respuesta a «Yo soy José Mujica… el poder está en el corazón»