Nada personal (Nothing personal). Urszula Antoniak , Holanda-Irlanda, 2009
Por Liliana Sáez

Primera aventura con sesgo autobiográfico, road movie desde Amsterdam hasta Connemara, en Irlanda. Ópera prima de Urszula/Anne (Lotte Verbeek), con Stephen Rea y tonos musicales de Ethan Rose. Camino andado/desandado hasta encontrar/perder lo que buscamos.

Rojo.

Clausurar el pasado, dejarlo atrás... viajar sin mochila, con lo puesto, con el futuro incierto, en busca de la nada, ni siquiera de la paz.

Ir tras la anonimia en planos generales. Confundirse con la geografía agreste, donde el viento sopla con fuerza o las rocas son testigos mudos de esa búsqueda.

Encontrar un otro semejante e ignorarlo y que te ignore... Volverte vacío de pasado, con la mirada limpia sobre una historia nueva.

Y no poder, porque todo lo que dejaste atrás va contigo, porque la vida no se pasa en limpio.

Mirar el futuro con ojos nuevos. En primeros planos. La melena roja al viento, los ojos azules vacíos de recuerdos, el cuerpo sostenido por una búsqueda de la nada, del silencio, de la soledad...

Azul.

La casa junto al lago en picado. El bote en el embarcadero, la meseta de piedra, el aire helado, el abismo enfrente.

Las paredes blancas, el banco junto a la puerta, la comida sobre la tabla, el calor del hogar allá adentro. Naturaleza muerta viva.

El hombre que es el otro y es viejo. La casa sin ánima de mujer. La mesa, la jarra, la ventana. La cocina cálida. El plato de comida, la conversación que no fluye. La música que quiere y no puede sonar.

La sensación de tocar algo sedoso cuando entierras las manos en primerísimo primer plano entre las algas dispuestas sobre el césped. La siesta al sol. La labor en la cocina. La noche en el pub. La música celta que despierta los músculos. El alcohol que ahoga la tristeza. El zigzag en el camino con profundidad de campo. La caída como anticipo del futuro.

Los sentidos dispuestos sobre la cama, enredados en la sábana, la violencia del deseo y la satisfacción de no depender de nadie. La cámara testigo y partícipe.

Blanco.

Sensaciones, todas sensaciones. Del aire frío, de la calidez hogareña, de las ganas jóvenes, del temor viejo, de la música que sostiene o hunde, del otro que está y no invade.

Aguardar para alcanzar lo que se quiere. Querer lo que no se quiere. Protegerse para estar expuesto. Animarse para detenerse. Buscarse para encontrarse.

Descubrir un amor distinto, sereno, que apenas alcanza a llegar cuando se va. Poesía cenital sobre los cuerpos enlazados cual yin y yang. La mejor imagen, paradigma de Nothing personal.

La soledad en primer plano, en plano conjunto de uno, nunca en plano americano. La soledad en plano general y en picado. La soledad... La soledad.